Por Olga Lidia Morales Anaya.
Se autoriza reproducción con crédito al autor
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Hermosillo, Son., a 18 de abril de 2012
No cabe duda de que mucho en la vida, antes que nada, es percepción … hasta enamorarse , primero te gusta la persona por lo que ves y crees y luego te enamoras por lo que es. En este caso aplicaré esta observación al fenómeno de la encuestas electorales, un instrumento de medición objetivo que usan partidos y políticos, antes que nada para “hacer creer” . Esto no siginifica que los resultados que arrojan sean falsos, sino todo lo contrario, solo que… todo depende.
En México existen 66 mil 740 secciones electorales, se trata de demarcaciones, que son en pocas palabras divisiones territoriales trazados bajo criterios de:
Pertenencia de cada distrito a una sola entidad federativa.
Equidad poblacional.
Existencia de población indígena.
Continuidad geográfica.
Tiempo de traslados.
En las credenciales de elector aparece el número de sección en la parte inferior derecha y es lo que cada ciudadano mexicano revisa y verifica para saber cual casilla le corresponde y la ubicación, en todas las entidades existen cantidades variables de secciones electorales y cada una comprende colonias, barrios, comunidades rurales e indígenas.
Obvio es que cada sección es diferente en cuanto a tipo de población, hay secciones que comprenden dos o tres colonias de clase social pudiente, hay otros que son clase media, Otros de escasos recursos y otros de condiciones de vida precaria..
Las colonias o barrios varían a la vez en residenciales, fraccionamientos de clase trabajadora o edificados por sindicatos, poblaciones estudiantiles, invasiones, etc. En el área rural puede haber ejidos, ranchos o poblaciones pequeñas, en fin… hay de todo, incluso hay secciones que abarcan diferentes estratos sociales.
Los partidos políticos tienen sus planes de trabajo sustentados en todos esos factores, pero a eso le suman los niveles académicos, culturales, religiosos o tipo de idiosincrasia de la población de cada sector y las condiciones físicas de cada lugar así como las diversas necesidades de sus habitantes. Al mecanismo de todos estos elementos ya cruzados entre sí, se le llama ingeniería electoral, la cual arroja un mapeo cualitativo y cuantitativo de debilidades y fortalezas e indicadores para direccionar estrategias de campaña y concentrar esfuerzos y recursos.
Pero ¿que tiene que ver toda esta limitada, sencilla y personal observación basada en sentido común, con el fenómeno de las encuestas electorales? … Pues que cada empresa encuestadora emplea su propia metodología, similar a una ingeniería electoral, desarrollada en tiempo, forma y lugar, según lo considere cada empresa y que aun siendo realizadas con todo el rigor de parámetros correctos y verdaderos, y en apego absoluto a los lineamientos del IFE, -con sus honrosas excepciones- pueden orientarse a reflejar determinados resultados. No cabe duda que las encuestas son un instrumento muy valioso de percepción.
Por eso digo que en cuanto a encuestas electorales, nada es verdad, nada es mentira… todo depende del sector donde la aplican.…
Cartografia electoral de IFE: http://tinyurl.com/cgb972h
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